Israel da otra vuelta de tuerca con nuevas medidas de venganza contra la población palestina

Unas niñas en los escombros de la casa familiar de Rateb Hatab Shukairat, demolida por los bulldozers israelíes. (Ahmad GHARABLI | AFP)
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Revocación del seguro social, extensión de las demoliciones de viviendas, deportaciones y refuerzo de tropas y asentamientos en el territorio ocupado son algunas de las medidas que el Gobierno israelí ha adoptado como represalia contra la población palestina tras los últimos atentados.

El gabinete de Seguridad israelí ha anunciado una serie de medidas contra los palestinos, en respuesta a una serie de ataques este fin de semana, que incluyen la revocación de beneficios para las familias de atacantes y un plan para deportarlas.

«El gabinete de Seguridad tomó una serie de decisiones para combatir el terrorismo y hacer que los terroristas y quienes los apoyan paguen un precio por ello», anunción la oficina del primer ministro, Benjamín Netanyahu.

El gabinete anunció seis medidas, incluyendo «la revocación de los derechos al seguro social y prestaciones adicionales de los familiares de terroristas que apoyen el terrorismo» y «la agilización y ampliación del otorgamiento de licencias de armas de fuego» para civiles.

Además, pondrá en marcha un plan para «legislar la revocación de los documentos de identidad israelíes de las familias de terroristas que apoyan el terrorismo», una iniciativa que ya había sido impulsada por los miembros más ultraderechistas del Ejecutivo y que se prevé sea discutida este domingo en la reunión del gabinete de gobierno.

Si bien los detalles de tal propuesta aún no han sido difundidos, la medida se aplicaría a aquellos palestinos que viven en el este ocupado de Jerusalén con permisos de residencia israelíes y que se verían obligados a radicarse en Cisjordania ocupada.

El gabinete también ha anunciado el refuerzo de tropas tanto militares como policiales en distintos sitios y el «fortalecimiento» de asentamientos judíos en Cisjordania.

Acelerar y ampliar los derribos de viviendas

El Consejo de Ministros israelí ha aprobado igualmente el precinto para el derribo cuanto antes de la casa de la familia del adolescente palestino de 13 años que hirió a dos israelíes el sábado por considerarlo «terrorista» y al que la Policía hirió poco después.

El ministro de Seguridad Nacional, el ultra Itamar Ben Gvir, ha explicado que además se ha aprobado modificar el criterio para precintar y derribar las casas de la familia de los que Israel considere «terroristas», incluso cuando no haya víctimas mortales en el atentado.

El jefe de los servicios secretos israelíes para el interior y los territorios palestinos, el Shin Bet, Ronen Bar, ha recibido el encargo de realizar un estudio jurídico al respecto.

Ben Gvir había propuesto además la legalización de varios asentamientos de Cisjordania –siete, uno por cada israelí fallecido el sábado– y la imposición de la pena de muerte.

El ataque del viernes por la noche tuvo lugar a las puertas de una sinagoga en el asentamiento de Neve Yaakov, en Jerusalén este ocupada, y fue seguido por otro ataque con arma de fuego el sábado por la mañana en el que dos israelíes resultaron heridos y por un disparo contra un restaurante en un asentamiento judío en Cisjordania.

Colonos matan a un palestino

Por otra parte, el comisario de la Policía de Israel, Yaakov Shabtai, pidió a los ciudadanos que tengan licencia de armas que las porten y las utilicen  y  Netanyahu anunció tras la reunión de urgencia con su gabinete de seguridad que se van a otorgar más permisos de armas entre civiles.

Estas medidas han agudizado la ola de violencia de colonos judíos contra la población palestina y en ese contexto, un joven de 18 años identificado como Karam Alí Salam murió tras ser tiroteado en la noche del sábado a las afueras de la ciudad palestina de Nablús, en Cisjordania.

El incidente se produjo cerca del asentamiento judío de Kedumim, entre numerosos incidentes protagonizados por colonos israelíes que han atacado a palestinos y sus viviendas, y han quemado numerosos vehículos.

Solo en la región de Nablús se han contabilizado 144 ataques en medio de los llamamientos del Gobierno israelí a que todos los israelíes con licencia porten armas.

Al menos 32 palestinos han muerto en acciones militares o de colonos israelíes en lo que va de año.

El repunte de este fin de semana fue desencadenado por una redada militar israelí el jueves en la ciudad de Jenin, en Cisjordania ocupada, que se saldó con la muerte de diez palestinos –el último este mismo domingo– y fue seguida por el lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza.

Por otra parte, el Ejército de Israel ha matado este domingo a un «sospechoso sirio armado» que estaba intentando cruzar la frontera en el sur de los Altos del Golán, territorio sirio ocupado por Israel.

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https://www.naiz.eus
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