Observadores vascos ratifican resultados de elecciones presidenciales

CNE
ISAAC MEDINA / CIUDAD CCS

A través de un comunicado, los veedores del país vasco, confirmaron la transparencia de las elecciones realizadas el pasado 28 de julio, en donde el pueblo venezolano reeligió al presidente Nicolás Maduro, para el periodo 2024 – 2030.

En este sentido, la delegación internacional destacó la transparencia y la audibilidad del sistema electoral en el documento que dio a conocer el Consulado de Venezuela en Bilbao.

En el texto, los observadores expresaron que las acusaciones de fraude carecen de cualquier fundamento y responden a una vieja estrategia política de elementos extremistas.

“Denunciamos la operación orquestada para crear confusión y desestabilizar el país. Esta tuvo su inicio en el ciberataque al CNE, prosiguió con acciones violentas que se cobraron varias vidas, y fue acompañada por una campaña de fake news”, reseña el documento.

Finalmente, los veedores instaron a la comunidad internacional a respetar el resultado de las elecciones presidenciales como expresión soberana del pueblo venezolano, del mismo modo llaman a mantener una relación respetuosa hacia Venezuela y sus instituciones.


Crónica de la experiencia de Izquierda Castellana como veedor internacional en las elecciones de Venezuela del 28 de julio

Al proceso electoral asisten más de 800 veedores internacionales, de los 5 continentes y numerosos países. Portavoces de organizaciones, movimientos sociales, el Foro de Sao Paulo, personal diplomático, periodistas, etc. Destaca la presencia diplomática rusa, bastante visible. No tanto la china o la cubana, más discretas.

Por parte del estado español, asisten delegaciones de BNG, EH Bildu, CUP, IU-PCE, Podemos. Y sectores de la izquierda abertzale, vinculados principalmente a lo que en su día agrupó Askapena. Así como algunas personas individuales ligadas a la solidaridad, medios de comunicación, etc.

El PSUV y los partidos del Gran Polo Patriótico dan importancia a este acompañamiento internacional, haciendo menciones en todas las intervenciones durante las diferentes actividades programadas. En todo momento somos acompañados por personal del partido, así como con escolta para los desplazamientos.

Se percibe que el contexto geopolítico mundial y regional son claves para entender este proceso electoral concreto, que es un reflejo, en clave no sólo electoral sino política, de la pugna y la confrontación a nivel global entre el eje de la resistencia y el imperialismo nazisionista y fascista.

En las calles de Caracas se percibe normalidad y tranquilidad, así como los efectos positivos de las medidas económicas que se han venido adoptando en los últimos tiempos, tanto para controlar la inflación, para la estabilización del tipo de cambio, así como para lograr la soberanía alimentaria,  y dar impulso a la producción nacional y la diversificación de la economía, a través de leyes como la Ley de Fomento de las Exportaciones No Petroleras, que pretende superar el modelo de dependencia económica en la industria petrolera.

El chavismo centra su discurso electoral en la paz, en los logros económicos, y en ser la única garantía para lograr cumplir las aspiraciones de la sociedad de vivir tranquilos y con perspectivas de futuro, sin necesidad de emigrar, etc. Se perciben sus intentos de ensanchar las bases de la revolución, incorporando a sectores de la pequeña y mediana burguesía, en una clave nacional y patriótica. Los desplazamientos por ejemplo se efectúan combinando el uso de transporte estatal, con camionetas de autónomos y pequeños propietarios. Y los actos políticos de encuentro con las delegaciones internacionales se llevan a cabo en la base militar de la Carlota, donde se instalan carpas a modo de feria de muestras, con presencia de numerosas pequeñas empresas nacionales venezolanas mostrando sus productos.

También se percibe que las fuerzas de la oposición cuentan con apoyo, y que hasta cierto punto, pretenden instrumentalizar los diferentes descontentos y el hartazgo ante las dificultades económicas y la inestabilidad, a través de los medios de comunicación y a través de las redes, que están en sus manos salvo pequeñas excepciones (TeleSur, Globo y Telegram). Hay que tener en cuenta que las fuerzas bolivarianas llevan ejerciendo el poder desde 1998, y que en ese tiempo se han tenido que enfrentar a numerosas dificultades, pero aunque pueda haber ciertos sectores populares descontentos ante las limitaciones del proceso, la corrupción, y ante décadas de inestabilidad económica y política y la violencia inducida por el imperialismo y la oligarquía, el proyecto bolivariano sigue anclado en las clases populares, representando sus aspiraciones.

En los días previos a las elecciones, que coinciden con los actos de cierre de campaña, se organizan 2 actividades, un encuentro con Jorge Rodríguez, Diosdado Cabello y Delcy Rodríguez, y otro con el presidente Nicolás Maduro. En sus intervenciones, se percibe una confianza firme en la victoria electoral frente al discurso ya establecido en los medios occidentales, confianza asentada en las estructuras de poder popular que han sido reactivadas de cara a las elecciones. El discurso de Maduro se centra en mostrar a las delegaciones internacionales de manera exhaustiva las últimas intentonas golpistas vividas, y se comparten datos concretos de los intentos de magnicidio durante la campaña, algo que no se había hecho público hasta entonces, para evitar generar miedo en la población. También se reflexiona sobre la realidad virtual y la Inteligencia Artificial, su utilización por parte del imperialismo, y la batalla entre “los bots, y los votos”. Desde el gobierno bolivariano se es consciente de que algo puede ocurrir, y se ha planteado la campaña barrio por barrio, con mítines con la presencia de Maduro en todos los estados de la república, y afrontando la jornada electoral desde una perspectiva bolivariana que rebasa los marcos de las democracias burguesas, como un acto revolucionario militante, de organización de masas, de disciplina y compromiso social y de confrontación con el fascismo escuálido. Haciendo a la vez eso sí llamamientos al diálogo con los sectores democráticos de la oposición, así como al respeto a la institucionalidad de la república bolivariana.

Dentro de las estructuras de poder popular que se han reactivado destaca la denominada como Maquinaria 1x10x7 y de Defensa del Voto, una experiencia de poder popular que organiza a la militancia chavista calle por calle, barrio por barrio, con núcleos y células de activistas organizadas no sólo para ir a votar y arrastrar a las bases del chavismo, sino para hacer política y construir organización. Destacan también las comunas, así como las Milicias populares y los motorizados, fuerza de paz a cuyo frente está Diosdado.

En cuanto a la GNB, nos vuelve a llamar la atención aquello que percibimos en nuestro viaje al Foro de Sao Paulo en 2019, la juventud de sus miembros, en torno a los 20 años, así como su clara procedencia de las clases trabajadoras. Algo que también se percibe en los miembros de las FANB, así como en el personal de seguridad y escolta del presidente. También se percibe el que se ha dotado al conjunto de las fuerzas y cuerpos de seguridad de la república bolivariana de una doctrina militar y de seguridad propia, así como de elementos ideológicos ajustados a la realidad nacional. Por poner un ejemplo, llama la atención que los vehículos comunmente conocidos como antidisturbios, utilizan el color blanco, e incorporan lemas patrióticos: “Dudar es traición”, “El Esequibo es nuestro, Venceremos”, “Oligarcas temblad, viva la libertad”.

En cuanto a la experiencia concreta como observadores, visitamos más de 10 colegios electorales en el barrio popular de Antimano, un barrio clásico del chavismo. Nos llama la atención la disciplina social que se percibe en el pueblo venezolano, y un grado de conciencia elevado. Hay multitudes de gente aguardando en largas filas para votar, desde horas muy tempranas de la mañana (los colegios electorales se abren a las 6h, y el chavismo comienza a movilizarse con “toque de diana militar” a las 5h) Recibimos numerosas muestras de cariño de la gente del común, que son conscientes de la importancia de esta batalla electoral, y que valoran la presencia internacional. También escuchamos a personas críticas con el gobierno, otras que van a votar por la oposición y que nos dicen que habían estado con Chávez, que nos trasladan sus opiniones con total libertad, así como con respeto.

Una vez se cierran los colegios, y se comienzan a percibir los primeros movimientos de la oposición fascista, en forma de ataques informáticos al CNE, asistimos a un acto en el Palacio de Miraflores, en el que se celebra la victoria electoral de Maduro, y se comparten los primeros datos sobre los pasos a dar para frenar el golpe. En este acto, el principal elemento es la presencia del pueblo organizado y la música, eso sí bajo estricta “Ley seca” (que se extiende los dos días previos a las elecciones, el día de las elecciones y el día posterior), con la actuación de numerosos artistas ligados al proceso, así como una muy breve intervención de Maduro. El acto, al que asisten los motorizados como principal elemento de seguridad, termina con un espectáculo luminoso impresionante de 300 drones chinos.

El lunes por la mañana somos invitados al acto institucional en la sede del CNE. Al que asisten el presidente del CNE Elvis Amoroso, Nicolás Maduro, todos los ministros del Gobierno, los dirigentes de todas las organizaciones del Gran Polo Patriótico, y los principales representantes de las Fuerzas Armadas Bolivarianas, así como las delegaciones internacionales. En Venezuela hay 2 poderes más aparte de los habituales en el marco de las democracias burguesas, el Poder Electoral y el Poder Popular. Se había generado ciertas expectativas entre los sectores más institucionales de los observadores internacionales en el sentido que el CNE ofreciera unos datos más completos del escrutinio y de esa manera facilitar las posiciones de los sectores que “no creen sin ver”, pero el acto sirve para dos cuestiones: por un lado, el nombramiento de Maduro por parte del Poder Electoral como Presidente electo para los siguientes 6 años, desde el respeto estricto a los cauces electorales, institucionales y constitucionales. Y por otro lado, y de manera principal, el acto rebasa la formalidad de la institucionalidad burguesa con la intervención de Maduro, que lleva adelante un discurso político y militante en clave antifascista haciendo un llamamiento a la movilización en la calle para garantizar la paz, pero llamando también a la contención. Estamos asistiendo a un intento de golpe de estado fascista, y el gobierno y las fuerzas chavistas están preparadas para hacerle frente, utilizando los cauces institucionales y la separación formal de poderes, pero utilizando también los cauces del poder popular y las fuerzas armadas, con medidas audaces, rápidas y efectivas.

A la vuelta al hotel, podemos observar los primeros movimientos de los guarimberos, que empiezan a concentrarse en grupos motorizados y a pie en algunas plazas, haciendo ruido, quemando algunos neumáticos, y que se dirigen a la sede del Poder Electoral. En los barrios del este de la ciudad, los adinerados, suenan algunas cacerolas, y comienzan a producirse los primeros actos de violencia fascista, por lo que permanecemos en el hotel, siguiendo las instrucciones del PSUV, hotel ubicado en un barrio que es feudo de los escuálidos, y desde donde se escuchan algunos disparos. Por la noche, Maduro habla a la nación por Telesur, compartiendo vídeos de los actos terroristas, analizando el componente novedoso de esta intentona golpista fascista, que se ha basado en la delincuencia de las bandas y en la persecución de la militancia del PSUV, anunciando las primeras detenciones. Llama la atención el que a parte de las medidas represivas, a las personas detenidas, muy jóvenes, se les obliga a reparar los daños materiales ocasionados en los barrios en los que han actuado, ante la presencia de la población.

El viaje al aeropuerto de las delegaciones internacionales se complica, por los cortes en carretera de la única vía de acceso y los disturbios de los terroristas, y se valora el traslado en aviones militares desde la base de la Carlota en Caracas. Finalmente, salimos escoltados en la madrugada del lunes al martes, que es cuando es más seguro. El martes por la tarde, estando en el aeropuerto, van llegando las imágenes de las importantes movilizaciones del chavismo, cuyas fuerzas se despliegan en la calle. Destacan las de los motorizados, en los que la gente confía como fuerzas de paz. En el aeropuerto, podemos conversar con algunos opositores, que rechazan las actuaciones de violencia callejera, o eso nos trasladan.

Fuente
https://ciudadccs.info