Desde su llegada a Caracas se ha sumado activamente a todas las campañas electorales “como espacio de lucha frontal contra el imperialismo norteamericano”. En el 2017 fue candidata por la organización política Chavismo Bravío para el proceso constituyente. Colabora con movimientos feministas, milita en la Plataforma Socialista Golpe de Timón y participa en el Frente Cultural de Izquierda. Se ocupa de la investigación social, especialmente en el rol de las mujeres en la construcción de la comuna venezolana.
Sus inicios de militancia política fueron a través del teatro de calle en una escuela de formación cultural llamada Crea y Combate, que más tarde se convertiría en un colectivo juvenil. Participó en los espacios fundacionales de la Juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela (JPUSV) en Caracas.
Al entrar en la Universidad Central de Venezuela (UCV) para estudiar Trabajo Social participó en el movimiento estudiantil. Luego esta militancia se concretaría en la organización de las Brigadas por las Residencias Estudiantiles (BRE). Terminó su carga académica y se involucró en la vicepresidencia de mujeres del PSUV. La moviliza también aportar al movimiento feminista venezolano.
Tamayba Lara es una de las activadoras en la fundación de las Residencias Estudiantiles Livia Gouverneur. Nació en Caracas, pero desde los 3 años de edad vivió en el estado Lara donde cursó estudios de primaria y educación media. Cumplió 18 años y regresó a la capital para optar por un cupo en la UCV.
Alba TV decidió entrevistar a Tamayba y este fue nuestro diálogo.
¿Cómo fue el proceso de fundación de las Residencias Estudiantiles Livia Gouverneur?
El proyecto de Residencias Estudiantiles fue una iniciativa impulsada a partir del año 2010 por la Alcaldía de Caracas junto al movimiento estudiantil revolucionario de la UCV, al cual se sumarían más tarde estudiantes de universidades creadas en revolución como la UBV, UNEARTE y UNEFA. Fue una lucha reivindicativa que logró agrupar a estudiantes, hijas e hijos de la clase trabajadora, provenientes de pueblos rurales y ciudades de todo el país, con necesidad de vivienda temporal para cursar sus estudios en la capital. Fue una oportunidad para la organización, a partir de la cual comenzamos a cuestionarnos la pertinencia de la educación que recibimos, la democracia, el trabajo productivo, los símbolos de la juventud, la necesidad de construir una sociedad socialista.
Comprendimos la importancia de “La unión del estudio y el trabajo”, el compromiso de poner “Los conocimientos para la satisfacción de necesidades” de nuestro pueblo y entendimos que nuestra lucha no era solo por una vivienda temporal sino por una opción de vida digna, productiva y sustentable para los estudiantes. Una lucha que se organizó a través de la conformación de brigadas por universidad y comisiones de trabajo orientadas estratégicamente por lo que llamamos "El manifiesto de las Brigadas por las Residencias Estudiantiles".
Destácanos por favor el momento en que se cristaliza la puesta en marcha de las residencias y Hugo Chávez firmando el decreto. ¿Estabas ahí? Cuéntanos ese momento
La lucha por las residencias estudiantiles fue también una oportunidad para estrechar lazos con organizaciones hermanas del movimiento popular, como el Movimiento de Inquilinos e Inquilinas, quienes nos invitaron a participar en la elaboración de la Ley de Regularización y Control de Arrendamiento de Viviendas (La primera ley realizada por iniciativa popular como Pueblo legislador), a través de la redacción de un capítulo sobre residencias estudiantiles privadas, este hecho fue clave ya que en la aprobación de la ley, el Comandante Chávez bajo la consigna de mandar obedeciendo aprobó el proyecto de residencias estudiantiles.
Fue un momento muy especial, tanto por el amor que siento y sentíamos los miembros de las Brigadas por el Comandante como por el claro mensaje revolucionario que él nos daba, convocándonos a defender la democracia popular, el principio de ejercer el poder obedeciendo la voluntad popular, lo cual considero es parte fundamental de su pensamiento y práctica, es un principio que se expresa constitucionalmente en la democracia participativa y protagónica.
¿Puedes hacernos un balance de la situación actual de los estudiantes que vivían en la Livia?
Lamentablemente el proceso de desalojo implicó un duro golpe para la moral del movimiento popular en general y para la organización estudiantil en particular, una acción policial en su contra fue algo que no esperaban los estudiantes, sin embargo, hoy mantienen una disposición de lucha en función de recuperar la residencia estudiantil como un espacio para la construcción de poder popular estudiantil.
¿Qué está pasando actualmente con los dos estudiantes que no tenían alojamiento? Lo denunciaste por tu cuenta twitter @TamyLara ¡Cuéntanos!
Luego del desalojo de las residencias, los estudiantes fueron ingresados a hoteles destinados para pacientes asintomáticos, donde permanecieron hasta recibir los resultados de las pruebas PCR, conforme fueron dando resultado negativo estos fueron desocupando los hoteles, quedando en la calle sin garantías para permanecer en la ciudad aquellos casos de estudiantes que no podían por diversas razones retornar a sus lugares de origen.
Son varias las razones que impiden a 30 estudiantes regresar a sus lugares de origen o permanecer en la ciudad por su propia cuenta, de los 400 residentes, 30 tienen condiciones materiales complejas, hay casos en los que estos jóvenes no tienen dónde regresar, viven en zonas rurales sin ninguna forma de conectividad (señal telefónica/internet) y sus carreras continúan en línea, trabajan en Caracas y son parte importante de la economía familiar, entre otras.
La tarde del lunes 17 de agosto, 6 estudiantes desocuparon uno de los hoteles en los que se encontraban, 1 consiguió posada con una amistad, 3 consiguieron un alquiler que les resultó accesible y 2 no tenían a dónde ir, estos 2 estudiantes estuvieron esperando respuesta institucional hasta altas horas de la noche, yo personalmente le escribí a distintas autoridades para que los atendieran por grupos de whatsapp de camaradas, a ver si alguna autoridad podía dar una respuesta institucional a esta situación.
Ante la falta de respuesta, publiqué a través de la red social twitter una denuncia sobre la situación de los estudiantes, que causó que algunas personas particulares se ofrecieran a recibirlos por esa noche y que algunos representantes de la JPSUV se manifestaron en la disposición de colaborar. Al día siguiente estos hicieron gestiones y finalmente los 2 compañeros fueron recibidos en el Instituto Nacional del Deporte (IND).
¿Cuál es el estatus de los acuerdos que han llegado con las autoridades? ¿Cuál ha sido el comportamiento de los funcionarios del Gobierno? ¿Se están cumpliendo los acuerdos?
Las autoridades de gobierno se comprometieron en primer lugar a restablecer el uso del edificio para las Residencias Estudiantiles Livia Gouverneur y en la reincorporación de las y los estudiantes regulares, así como la ubicación de un espacio para la estadía temporal de aquellos estudiantes que no tuviesen condiciones de regresar a sus lugares de origen, así mismo el apoyo con la movilización hasta sus hogares para aquellos que podían regresar.
El Ministerio de la Juventud recibió a 15 estudiantes en las instalaciones del Instituto Nacional del Deporte, mientras que el Ministerio de Educación Universitaria dispuso condiciones para la movilización de los estudiantes que podían regresar, sin embargo al día de hoy (sábado 22 de agosto) aún hay 15 estudiantes arrimados en condiciones vulnerables en casas de amistades que necesitan permanecer en la ciudad.
¿Cuál es la situación actual de los estudiantes de la Livia que están en los hoteles? ¿Tienen algún apoyo en alimentación y demás necesidades? ¿Están atendidos los residentes que resultaron positivo para el coronavirus?
Hastal el 22 de agosto solo quedaban 4 estudiantes en hoteles, estos están recibiendo alimentación y un trato digno. Todos los estudiantes que pasaron por los hoteles de asintomáticos fueron atendidos dignamente. Sin embargo, estos estudiantes se verán en difícil condiciones al salir de los hoteles ya que tampoco cuentan con respuesta institucional.
¿Cuáles siguen siendo sus demandas y exigencias a los funcionarios?
Los/as estudiantes insisten en que un elemento central es garantizar que una vez reanudadas las clases presenciales, el edificio debe retomar su uso de residencias estudiantiles, que debe respetarse la estructura organizativa interna, es decir, el consejo consultivo integrado por 9 voceros y voceras (1 por piso) como instancia de cogestión del espacio. Expresión del principio constitucional de la democracia participativa y protagónica, el retorno de los/as estudiantes regulares y la ubicación de un espacio donde puedan permanecer 15 de ellos que aún no tienen respuesta institucional sobre su estadía en Caracas.
¿Qué piensas con respecto al destino de los residentes de la Livia y de la infraestructura como tal?
Con respecto a la infraestructura, donde funciona la residencia, es un espacio recuperado por la revolución, muy codiciado por el capital inmobiliario, que para el sector especulativo tiene un alto valor mercantil. Al ser rescatado por la revolución y en particular para residencias de estudiantes, de uso púbico, es deber de todos y todas garantizar que ese espacio de la ciudad — uno de los centros de Caracas, la capital de la revolución— sea parte de la transformación de la ciudad, una ciudad para la gente y no para el capital. El devenir de esa estructura será reflejo de hacia dónde avanza la revolución.
En relación al destino de las y los residentes, debemos saber que estos son la garantía de una gestión popular de las residencias, porque no se trata de residencias estudiantiles por sí solas, sino del tipo de gestión. Los residentes, todas las generaciones que han pasado han demostrado que apuestan a un modelo autogestionado y cogestionado, y de la misma forma como el destino de esa estructura habla del devenir de la revolución, el de los residentes también será reflejo del modelo de gestión que se quiere impulsar, tanto desde las estructuras del Gobierno como desde las fuerzas de base que reivindican una gestión popular y comunitaria.